Dicen que fue un temblor de Tecnologia… 

Hay quien piensa más en un fallo de Ciberseguridad… 

Incluso hay opiniones de Conspiraciones…

Ciberseguridad

Pero, alguien se ha imaginado un mundo sumido en la Oscuridad…!!!

No hay luz, no hay internet, no me va el teléfono. 

La Ciberseguridad ni está ni se le espera… 

Así, el que más y el que menos estábamos perplejos, no sabíamos si era la última bromecita de Trump, un ataque cibernético ruso, o si los Chinos habían cumplido su desafío de invadir el mundo.

Mientras Red Eléctrica Española descartaba un ciberataque y apunta a una «desconexión de generación», las teorías conspirativas han encendido las redes…

El 28 de abril de 2025, España y Portugal vivieron la pesadilla: Dicen que un «cero energético» que paralizó la península ibérica, afectando a millones de personas y extendiéndose a países como Francia e Italia.

¿Qué hay detrás de este apagón histórico?

¿Un fallo técnico, un ataque cibernético o algo mucho más oscuro? 

Como profesional de la tecnología y Ciberseguridad, me sumerjo en este evento para explorar sus causas, consecuencias y las sombras que lo rodean, desde la ciberseguridad hasta los temores de la 3ª guerra mundial.

Fallo Tecnico o Ciberataque Estrategico…???

El apagón comenzó con una oscilación masiva en el flujo de energía, desencadenando cortes en cascada. Red Eléctrica Española informó que en apenas cinco segundos se perdió el 60% de la energía en la península, un evento sin precedentes. La explicación oficial señala una «desconexión de generación», posiblemente vinculada a la alta dependencia de energías renovables como la solar, que no se absorben uniformemente en la red. Sin embargo, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) investigaron desde el primer momento la hipótesis de un ciberataque.

La digitalización de las redes eléctricas las hace vulnerables. En 2015, Ucrania sufrió un apagón masivo por un ataque con el malware BlackEnergy, atribuido a Rusia. En España, el CNPIC ha registrado intentos de accesos ilícitos a infraestructuras críticas, con unas 40k amenazas diarias.

Aunque no hay evidencia de un ciberataque en este caso, la posibilidad no puede descartarse. Los sistemas SCADA, que controlan remotamente la generación y distribución de energía, son un blanco perfecto. Un ataque coordinado podría manipular controladores lógicos programables (PLC) o explotar software obsoleto en subestaciones, causando un colapso sin activar alarmas.

El Caos como Consecuencia

El apagón dejó a hospitales al borde del colapso, con generadores de emergencia funcionando al límite. Empresas, desde fábricas de automóviles hasta industrias químicas, que detuvieron su producción, enfrentando pérdidas millonarias. 

El Metro de las principales ciudades y aeropuertos quedaron operativos a duras penas. A nivel social, la falta de semáforos generó un «experimento libertario» de movilidad que, sorprendentemente, no acabó en desastre, pero evidenció nuestra fragilidad.

Económicamente, el impacto es incalculable. Según el Banco Mundial, pero la Ciberseguridad y los ciberataques masivos ya representaban en 2023 el 1.5% del PIB global al afectar sectores clave. Un evento como este, si fuera intencional, podría disparar esas cifras, especialmente en un mundo donde la demanda eléctrica crece con la adopción de vehículos eléctricos y la digitalización.

La Ciberseguridad en Jaque…

Pero y si la IA está detras…???

La Superinteligencia Artificial (IA) añade una capa de complejidad. En 2024, la Agencia de Ciberseguridad de la UE (ENISA) alertó sobre el uso de herramientas de IA para crear desinformación a gran escala, como deepfakes que manipulan elecciones.

Pero, y si la IA fuera usada para orquestar un apagón?

Un sistema de IA avanzado podría identificar vulnerabilidades en la red eléctrica, coordinar un ataque y borrar sus huellas, superando las capacidades humanas.

Aunque no hay pruebas de esto en el apagón del pasado lunes 28, la idea no es descabellada. El malware Stuxnet, creado supuestamente por USA e Israel en la década de 2000, demostró que los ciberataques pueden dañar infraestructuras críticas como centrales nucleares. Si una IA maliciosa estuviera involucrada, las consecuencias serían devastadoras y nuestra ciberseguridad actual, aunque robusta, podría no estar preparada.

Conspiraciones Esotericas

Las Redes Sociales, especialmente X, se inundaron de teorías. Algunos usuarios apuntaron a un sabotaje de USA e Israel como represalia por la postura crítica de España hacia Israel, o incluso a Rusia, en el contexto de su «guerra de agresión digital» contra Europa. Otros fueron más allá, sugiriendo un ataque electromagnético orquestado para desestabilizar la región, una amenaza que el gobierno español lleva preparando desde 2023 mediante proyectos del INCIBE.

Y luego están las teorías esotéricas, donde hay quienes creen que el apagón fue causado por “una tormenta solar masiva”, como la de 1989 en Québec, o incluso por una «señal extraterrestre» destinada a advertirnos. Si bien estas ideas carecen de fundamento, reflejan un temor colectivo de que estamos a merced de fuerzas que no controlamos, sean tecnológicas, naturales o de otro mundo.

La Amenaza de la 3ª Guerra Mundial

El contexto geopolítico el activismo no ayuda a calmar los ánimos. Los ciberataques rusos contra Europa se duplicaron en 2024, según la ENISA, y suelen probarse primero en Ucrania antes de expandirse. Un apagón masivo podría ser un ensayo para una guerra híbrida, donde el caos energético paralice economías y sociedades antes de un conflicto mayor. Imagina un «Pearl Harbor cibernético», como lo llamó Donald Rumsfeld, que deje a Europa sin energía en un momento de tensión global.

La interconexión de las redes eléctricas europeas, aunque mejora la resiliencia, también aumenta el riesgo. Un ataque en un país podría propagarse como un virus, afectando a todo el continente. En un mundo donde la energía es poder, un apagón masivo no es solo un inconveniente sino un arma de doble filo.

Una Llamada a la Accion y a la Seguridad de la Ciberseguridad

El apagón de 2025 nos deja lecciones claras…

Primero, necesitamos invertir más en ciberseguridad. Sistemas actualizados, simulacros de ataques y formación para detectar amenazas.

Segundo, la colaboración internacional es crucial; ningún país puede enfrentar solo un ciberataque a gran escala.

Tercero, debemos diversificar nuestras fuentes de energía y mejorar la capacidad de almacenamiento para evitar desequilibrios como los que vimos.

Pero también nos invita a reflexionar en si: 

Estamos preparados para un futuro donde la tecnología, que tanto nos empodera, pueda volverse en nuestra contra?

Como profesionales, debemos liderar el cambio, abogando por sistemas más seguros y resilientes, mientras mantenemos un ojo crítico sobre las narrativas que nos rodean. Porque, en un mundo hiperconectado, la próxima oscuridad podría no ser solo eléctrica, sino existencial.

Qué opinas…???

Crees que estamos al borde de un nuevo tipo de guerra, o es solo un recordatorio de nuestra vulnerabilidad tecnológica…???

Cuenta, cuenta… 😎

💡 𝗨𝘀𝗮𝗺𝗼𝘀 𝗰𝗼𝗼𝗸𝗶𝗲𝘀 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗾𝘂𝗲 𝘁𝘂 𝗲𝘅𝗽𝗲𝗿𝗶𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗲𝗻 𝗻𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗼 𝘀𝗶𝘁𝗶𝗼 𝘀𝗲𝗮 𝘀𝗶𝗺𝗽𝗹𝗲𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗴𝗲𝗻𝗶𝗮𝗹…

𝗔𝗹 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗶𝗻𝘂𝗮𝗿 𝗻𝗮𝘃𝗲𝗴𝗮𝗻𝗱𝗼, 𝗮𝗰𝗲𝗽𝘁𝗮𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝘂𝘁𝗶𝗹𝗶𝗰𝗲𝗺𝗼𝘀 𝗖𝗼𝗼𝗸𝗶𝗲𝘀 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗺𝗲𝗷𝗼𝗿𝗮𝗿 𝗲𝗹 𝗿𝗲𝗻𝗱𝗶𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼, 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮𝗹𝗶𝘇𝗮𝗿 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗲𝗻𝗶𝗱𝗼 𝘆 𝗺𝗼𝘀𝘁𝗿𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗮𝗻𝘂𝗻𝗰𝗶𝗼𝘀 𝗿𝗲𝗹𝗲𝘃𝗮𝗻𝘁𝗲𝘀.

¡𝗡𝗼 𝘁𝗲 𝗽𝗿𝗲𝗼𝗰𝘂𝗽𝗲𝘀! 𝗣𝘂𝗲𝗱𝗲𝘀 𝗮𝗷𝘂𝘀𝘁𝗮𝗿 𝘁𝘂𝘀 𝗽𝗿𝗲𝗳𝗲𝗿𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮𝘀 𝗰𝘂𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗿𝗮𝘀... 😎

🔍 ¿𝗤𝘂𝗶𝗲𝗿𝗲𝘀 𝘀𝗮𝗯𝗲𝗿 𝗺á𝘀?

𝗖𝗼𝗻𝘀𝘂𝗹𝘁𝗮 𝗻𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗮 𝗣𝗼𝗹í𝘁𝗶𝗰𝗮 𝗱𝗲 𝗖𝗼𝗼𝗸𝗶𝗲𝘀
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